Llegó la gustadísima «Vitrina», la columna de sátira política de Punto Medio.

Cántese al estilo de Edwin Luna y La Trakalosa de Monterrey… O mejor aún, al estilo del niño izcallense Leonardo Gabriel… “Sé que no estoy en condiciones de exigir… Y que tengo cosas por corregir… Sé que no he sido la mejor persona… Y no soy el indicado pa’ pedir… Sólo en esta ocasión, por favor, Dios mío, haz una excepción… Préstame a mi padre, dame unos minutos para recordar qué se siente abrazarlo… O cómo decirle que allá en nuestra casa, todos lo extrañamos… Hace falta su risa y hasta sus regaños… Préstame a mi padre, daría lo que que fuera por oír de nuevo todas sus historias… Porque me dijera: ¿cómo estás mi niño?, y contarle mil cosas… De sentir de nuevo sus manos rasposas… Préstame a mi padre, por favor Diosito, no lo regreso tarde… ay ay ay, jijos de María Morales… Pues qué les cuento, que ahora sí que me enganché con este concurso de La Voz, en su versión niños… Y es que, gracias a unas notas de este periódico, me enteré que estaban participando tres niños izcallenses y que dos de ellos, llegaron hasta la mismísima final de los finales… Una era mujer y de nombre Habana Zoé… Que luego me enteré que era nieta de Juanita Mendoza de Angulo y de don Julián; la chamaquita tiene lo suyo y tienen una voz que encanta, pero el otro, el tal Leo, no “cantaba mal las rancheras”… Y la neta del plamneta, el que traía el “ponch”, era este pequeñín que se robó el corazón de todo mundo, por su historia de vida… Y es que el canijo trae la cantada en las venas; y no sé si tuvieron la oportunidad de escucharlo, pero cuando yo oí la de “préstame a mi padre”, hasta se me encendió el “pelómetro” dijera la güera Yuri… jajajaja… Son de esos cantantes que, cuando están en pleno show, algunas de sus notas te hacen reacción en el cuerpo, y eso se logra cuando el cantante “vive la canción”… Pues Leo es de esos y cada que le entraba al escenario, al chamaco “se le veía el hambre de triunfo”, de querer hacer las cosas bien, y eso, es lo que hace que la gente tenga éxito… Por desgracia, la votación no le favoreció ni a él, ni a Habana, ya que al final de la competencia, el mecanismo es que la gente, el televidente, vota por su favorito… Y bueno, al decir verdad, los cuatro finalistas tenían talento y mucho; y el que ganó, también tenía lo suyo y algo más, ya que parece ser que es hijo de familia “antorchista” y esto pudo ser factor para que se inclinara la balanza a su favor, por aquello de que esa estructura de personas, pudo haber votado en bloque… Aunque aclaro, no demerito al chamaco de nombre Kevin Aguilar, que también canta muy bien y tiene harto talento, y además, parece ser que es vecino del municipio de Nicolás Romero o Atizapán…Y bueno, me enteré que un grupo de vecinos se organizaron para ver la transmisión de la final en la vía pública, con pantalla gigante y toda la cosa; y la verdad, los pocos pelos que estaban, estaban más que bien peinados y echados para adelante; en su mayoría, en apoyo a Leo… Y bueno, por desgracia, la felicidad no fue completa, ya que cuando se anunció al ganador, pues no fue el que todo mundo en ese estacionamiento de la zona de Los Gringos, esperaba… Y ya que hablamos de este tema, pues no quiero dejar de comentar ese buen gesto que tuvo el tal Markus Galindus Lindus, quien en esos videos y visitas que hace, contactó al niño Leo antes de la final, y lo hizo, también, después, para entregarle unos regalos por su gran participación; su idea, era levantarle el ánimo después del resultado no favorable, pero cuál va siendo la sorpresa, que el chamaco estaba relajado y muy conciente de lo que pasó, de tal suerte que hay Leo para rato y echado para adelante… El Markus, la verdad es que se lució, ya que no sólo le llevó buenos regalos, sino que, también, destinó el día a una convivencia familiar, ya que el papá de Leo, cumplía años el 1 de junio y se los llevó a comer y al cine… Buen gesto la verdad… La familia de Leo no está en las mejores condiciones y un festejo como el que les ofreció Markus, la verdad es de reconocer y agradecer… Pues bien, yo creo que la carrera de Leo apenas comienza y si bien, seguro lo veremos trabajando con su papá nuevamente en las calles y en establecimientos de comida en Izcalli, no se descarta que un “cazador de talentos”, lo fiche para que inicie una carrera, ya que tiene voz, carisma y sencillez, que son elementos clave para ser de esas estrellas que aclama el pueblo… Felicidades para él y para Habana Zoé, quienes hicieron un muy buen papel en el concurso y pusieron en alto en nombre de su tierra… Creo que por hoy ha sido todo amigos, nos leemos como cada semana, el próximo viernes… “Me oí como Espinoza Paz”… jajaj… Bye.