Descartan alarma en Izcalli por Coxsackie
No es peligroso ni requiere tratamiento especial, explicó el DIF
Autoridades médicas del DIF de Cuautitlán Izcalli confirmaron un brote del “Síndrome de Mano, Pie, Boca”, causado por el virus “Coxsackie A16”, que ha afectado a niños de diversas colonias del municipio, sin embargo, aseguran que “no debe existir alarma entre la población, ya que se trata de un virus de baja peligrosidad”.
A través de un comunicado, la pediatra de la Clínica Materno Infantil, Jaqueline Brown Romero, explicó que el síndrome se presenta principalmente en pequeños de 1 a 5 años, manifestando un cuadro sintomático parecido a una gripa común, con flujo nasal, tos, y en algunos casos, un poco de fiebre.
A uno o dos días de que se presentan estos síntomas, inician las lesiones en la boca, que puede ser desde un puntilleo hemorrágico en su paladar, hasta úlceras que se pueden localizar exclusivamente en paladar y garganta, o bien, se pueden diseminar en la lengua y mejillas en la parte externa; en casos muy severos, se puede presentar la orilla de la boca y en los labios.
Alrededor del tercer día en que se presentan las aftas en la boca, en algunos casos, se puede presentar un salpullido fino en el cuerpo, acompañado de pequeñas úlceras en las palmas de la mano y las plantas de los pies.
”Definitivamente no es una situación que deba alamar a la población izcallense, ya que se trata de una enfermedad similar a la gripa, con la complicación de las pequeñas úlceras que incomodan y no permiten la alimentación adecuada, pero la enfermedad desaparece tan pronto como una gripa común”, explicó la especialista.
El “Síndrome Mano, Pie, Boca”, se cura en un periodo de cuatro a seis días, siendo las ampollas, el último síntoma que se presenta.
No requiere de un tratamiento, sólo de un manejo sintomático que sirve para controlar la fiebre en caso de que se presente, controlarles el dolor de la boca, y algún medicamento para desaparecer el salpullido.
El síndrome que comúnmente se confunde con gripe o viruela, se contagia por saliva al compartir comida, cubiertos, agua, por dar besos muy cercanos a la boca; en algunos casos, muy extremos, por heces fecales, pero en niños que han tenido problemas muy severos de salud.
El virus “Coxsackie A16” vive en el ambiente, es como la gripa, viaja a través del aire y se puede contagiar en cualquier momento.
Para evitar que los pequeños contraigan la enfermedad, es importante evitar que compartan utensilios de comida y los alimentos, que se encuentren bien hidratados y procurar que estén en lugares frescos, pues es más común que el virus se reproduzca en lugares calurosos.
En lugares de reunión, como pudieran ser los clubes de verano, es importante detectar si una niña o niño presenta alguna lesión en la boca, para evitar que asista uno o dos días para que no contagie a sus compañeros.
Gabriela Morfín, doctora de la Estancia Infantil Paseos de Izcalli, informó que en este centro se detectó el primer caso del síndrome el pasado 23 de junio, en un niña que tenía el brote de las úlceras en la boca y en las palmas de las manos; inmediatamente, se apartó a la menor de sus compañeros y se habló a sus padres, quienes la llevaron con un pediatra que dio el diagnóstico del virus Coxsackie.
En adelante, se detectó un total de 11 casos del síndrome mencionado; posteriormente se tomaron medidas profilácticas, así como la limpieza de la estancia y consultorio médico.
La mayoría de los niños fueron diagnosticados de manera oportuna, lo que evitó más contagios y, aunque la Estancia Infantil no cerró sus puertas, varios padres de familia optaron por no llevar a sus hijos para evitar un posible contagio.
Los niños que asistían estaban cuidados bajo las medidas precautorias consistentes en la limpieza constante, de ellos y el lugar en el que se encuentran, y evitar compartir utensilios de comida.