David Nieblas Meza escribe Tinta Suelta, su columna semanal en Punto Medio

• Daniel Serrano, su “nefasta actitud” no le ayuda en nada.

La recomendación de los especialistas es muy clara, a las personas egocéntricas, hay que decirles las cosas con sinceridad, pero con tacto: “wey, no eres el centro del universo”, dijeran por ahí los jóvenes.

Desde hace unas semanas, quizá meses, el morenista Daniel Serrano ha asumido una actitud muy lamentable en contra de mi persona y del medio en el que trabajo; le ha dado, no sólo por criticar todo lo que no le gusta de lo que escribimos, sino de querer adjudicarnos calificativos y funciones que sólo están en su perturbado imaginario.

Quiero pensar que es por ignorancia y no por “su mala entraña”, lo que está haciendo; porque peor sería que se trate de una “estrategia maquiavélica” para desprestigiar una trayectoria de décadas, en el ejercicio periodístico en Cuautitlán #Izcalli.

Cosa que el señor quizá no sepa, porque su llegada a este municipio, no data de mucho tiempo.

La nefasta actitud del señor Serrano, raya en la “perfección inmaculada”; pareciera ser que él está en el nivel Dios, en donde todo lo sabe, y todos están mal, claro, a su limitado juicio.

La primer intentona por crear una estrategia de desprestigio, fue cuando en este medio publicamos el resultado de una encuesta en donde no salía favorecido; la segunda, la semana pasada en donde dimos la noticia de que había “salido sorteado” en el proceso de insaculación de su partido, para participar en las diputaciones plurinominales.

A no ser porque ya la inteligencia no le de para más, o bien, que esté empezando a padecer “analfabetismo funcional”, no se puede entender la crítica a una descripción simple de un hecho, como lo fue, que salió sorteado de una tómbola. Sus conjeturas o apreciaciones sobre algo que leyó, eso, ya es otra cosa.

Pareciera ser que su perfeccionismo es muy alto para cuando pone el ojo en otras personas, ojalá que también escuche la sarta de estupideces que dice, a la hora de querer atacar o desprestigiar a un servidor.

Parece ser que al disminuido líder no le están saliendo bien las cosas, quiere corregir a todo mundo, pero el señalado es él; hay que recordar que quien perdió la pasada elección de presidente municipal, fue el “gran dirigente” Daniel Serrano y fue en gran medida, por el escándalo de corrupción que se generó en torno a su persona; de quien hay serias dudas sobre su humanidad, de qué vive y de dónde viene, es de él.

Y algo grave ha de estar pasando con él y su grupo, porque a pesar de asumir una actitud de “evangelizador”, algunos de sus “discípulos” o “apóstoles”, han estado abandonando el barco, y no precisamente porque hayan estado muy a gusto con la actitud de su diminuto líder.

“Quien lo trajo a Izcalli”, por ejemplo, ya lo abandonó.
Lo dije en una ocasión anterior y lo vuelvo a repetir, señor Daniel, “el respeto al derecho ajeno es la paz”, y “a toda acción, corresponde una reacción”; no se crea Dios, porque no lo es.

Y le voy a decir algo que a lo mejor no sepa porque acaba de llegar al municipio hace poco: no es la primera vez que acá lidiamos con “borrachos” de poder, que aunque no es su caso, porque ni siquiera llega aún a la etapa del precopeo, es preciso aclarar que si de algo estamos orgullosos y nos hace caminar con la frente en alto, es nuestra profesión y dignidad.

No critique lo que usted ejerce contra quienes ve que afectan sus intereses; antes de enjuiciar, cheque lo que usted dice en sus transmisiones; verá que se le va a caer la cara de vergüenza de palabras, calificativos y conjeturas que utiliza, que por cierto no son ciertas y sí, viles mentiras.

Una acotación más, se equivoca cuando asegura que estamos en contra de la 4T, del movimiento y de AMLO; acá no sudamos calenturas ajenas; tenemos muy buenos amigos en todos los partidos, incluido el suyo, con quienes también compartimos y disfrutamos de la amistad sincera. Le recordarmos que usted “no es el centro del universo”, y si hoy no hay una buena relación con usted, no quiere decir que no la tengamos con los morenistas o que “tengamos pleito” con Morena.

Usted Daniel Serrano no es Morena, y por lo que se ve y critica, tampoco es digno representante de sus postulados.