Emprende gobierno de Daniel Serrano “terrorismo fiscal” contra empresa Alpura en Izcalli
En el marco de la “campaña de regularización” que actualmente impulsa el Organismo Público Descentralizado para la Prestación de los Servicios de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (Operagua), este martes se llevó a cabo un operativo inusual contra la empresa Alpura, al colocarle decenas de sellos de restricción de servicio por presuntos adeudos con el organismo municipal.
El procedimiento corrió a cargo de personal del departamento de Ejecución Fiscal de la dirección Comercial de Operagua y ha sido calificado como excesivo y de carácter intimidatorio, ya que los sellos no sólo se colocaron en accesos estratégicos, sino también sobre barrotes exteriores de la empresa, en lo que algunos consideraron una maniobra mediática y punitiva para afectar la imagen de la compañía.
Alpura, una empresa reconocida a nivel nacional e internacional por la calidad de sus productos —distinción que recibió recientemente por parte del gobierno federal—, cuenta con pozos propios para su abastecimiento de agua.
De acuerdo con fuentes internas, sus pagos por el uso del recurso hídrico se realizan directamente ante la Comisión Nacional del Agua (Conagua), lo que pone en entredicho el sustento legal de la intervención del organismo municipal; se supo que el posible adeudo sería por “descargas de agua” y no por uso de agua potable.
La acción ha generado desconcierto en el sector empresarial, ya que se inscribe dentro de una campaña de “regularización” emprendida por Operagua, pero que en este caso se aplicó con una fuerza inusual.
La colocación masiva de sellos, más que una notificación administrativa, fue interpretada como un acto de presión que raya en el “terrorismo fiscal”, según expresaron personas allegadas a la compañía.