* El partido nació como una alternativa democrática contra viejas prácticas de la política tradicional, recuerda Jorge García
En el marco del proceso interno de Morena para la elección de los presidentes de los seccionales, el exdiputado local Jorge García expresó su preocupación por diversas situaciones que, a su parecer, podrían poner en duda la equidad del ejercicio democrático dentro del partido en Cuautitlán Izcalli.
Jorge García consideró que lo ocurrido en algunas zonas del municipio podría interpretarse como una “especie de elección de Estado”, al observar que personas presuntamente vinculadas con la estructura del gobierno local, participan activamente en las jornadas internas.
Según su testimonio, algunos de estos operadores portan chalecos con el nombre del alcalde Daniel Serrano Palacios, lo que ha generado comentarios y desconcierto entre la militancia.
El exlegislador detalló que durante la jornada celebrada en la zona de La Quebrada, se presentaron incidentes relacionados con el acceso restringido a observadores y el registro apresurado de nuevos participantes, además de movimientos que, en su opinión, deberían revisarse con mayor detenimiento por parte de las instancias competentes del partido.
Hay favoritismo para registrar de última hora a la gente allegada al grupo del alcalde; hay personas acarreando a votantes con la promesa de entrega de incentivos, expuso.
Jorge García subrayó que su intención no es descalificar el proceso, sino invitar a las autoridades de Morena a reforzar los mecanismos de supervisión interna, con el fin de asegurar un piso parejo entre los distintos participantes y fortalecer la confianza de la militancia en los procedimientos del movimiento.
Recordó que Morena nació como una alternativa ética y democrática frente a las viejas prácticas de la política tradicional, por lo que insistió en que estos principios deben prevalecer en todo momento, especialmente en los procesos de elección interna.
Al día de hoy, las viejas prácticas del PRI, se están viviendo por desgracia en Cuautitlán Izcalli, concluyó Jorge García.