Destinará Daniel Serrano 16.8 millones para nueva estructura de “Guardianes del Pueblo”
* Ganarán más que doctores y docentes del DIF de Cuautitlán Izcalli
La recién creada Dirección de Democracia Participativa en Cuautitlán Izcalli tendrá bajo su mando una estructura de 97 personas denominadas “Guardianes del Pueblo”, cuyos salarios mensuales superarán los ingresos de médicos, nutriólogos y docentes del DIF municipal.
Esta decisión ha sido impulsada por el alcalde de Cuautitlán Izcalli, Daniel Serrano Palacios, líder de un grupo político al interior de Morena, y quien nombró a Luis Fernando Vázquez, uno de sus operadores políticos más cercanos e incondicionales, como titular de esta Dirección que tendrá bajo su cargo esta estructura.
De acuerdo con el tabulador de sueldos y prestaciones aprobado para este año, cada “Guardián del Pueblo” recibirá un salario mensual bruto de aproximadamente $14 mil 486, lo que incluye prestaciones de ley como aguinaldo y prima vacacional. Esta cifra coloca a los “Guardianes” por encima de los ingresos de profesionales que brindan servicios esenciales en el DIF municipal.

El médico general mejor pagado en el DIF gana $14 mil 628 brutos y $11 mil 368 netos, mientras que otros médicos oscilan entre $14 mil 600 y $10 mil 543 brutos. Un nutriólogo, por ejemplo, percibe $11 mil 613 brutos; un odontólogo gana $10 mil 067 brutos; y el docente mejor pagado, recibe un salario bruto de $9 mil 216 pesos. Es decir, los “Guardianes del Pueblo” tendrán un ingreso superior al de profesionales especializados que brindan atención directa a la población.
El costo total anual de los 97 Guardianes del Pueblo ascenderá a $16 millones 862 mil 480, una erogación considerable para las finanzas municipales. Hasta el momento, no se ha informado con claridad sobre las funciones específicas de esta estructura, aunque se ha dicho que harán “visitas casa por casa” para levantar encuestas y recabar datos; no existe ningún reglamento conocido, que defina con precisión las responsabilidades o el alcance de sus actividades.
RIESGOS DE PARCIALIDAD EN LA NUEVA DIRECCIÓN
La Dirección de Democracia Participativa, que dirige Fernando Vázquez desde hace unos días, no sólo controlará la estructura de los 97 “Guardianes del Pueblo”, sino también la organización de las elecciones de autoridades auxiliares, como los Consejos de Participación Ciudadana y delegados municipales, lo que podría traducirse en una ventaja política directa para Morena y el grupo político encabezado por Daniel Serrano en Cuautitlán Izcalli.
Luis Fernando Vázquez ha sido operador político del ahora alcalde desde hace varios años. Su trayectoria incluye haber sido responsable de la estructura de promoción del voto de Morena en Cuautitlán Izcalli durante las elecciones de 2024, además de haber ocupado diversos cargos de representación ante el INE desde 2012. Su nombramiento al frente de esta Dirección, refuerza las sospechas de que esta nueva estructura podría convertirse en una plataforma de control político de Daniel Serrano, más que en un mecanismo genuino de participación ciudadana.
La regidora Ely Quintana en su momento y ante el pleno del Cabildo, criticó abiertamente la creación de esta Dirección como parte de una supuesta “Reforma Municipal”, la cual, dijo, quedó en un tema “cosmético”, señalando que, la Dirección de Democracia Participativa, es “una dependencia encaminada a realizar un activismo político que no lleva en nada a favorecer a las y los ciudadanos”.
UNA DIRECCIÓN PARTIDIZADA
El nombramiento de Luis Fernando Vázquez como titular de la Dirección de Democracia Participativa plantea riesgos debido a su historial de activismo y vinculación con Morena y Daniel Serrano, hoy en el poder, entre ellos:
Parcialidad en la consulta y participación: La fuerte identidad partidista de Vázquez podría derivar en decisiones y consultas sesgadas, favoreciendo intereses políticos en favor de Morena y de quien ha sido su mentor; afectando la pluralidad y diversidad de opiniones ciudadanas.
Uso político de los “Guardianes del Pueblo”: Estas 97 personas, con un presupuesto anual considerable, podrían convertirse en una estructura de movilización política, en lugar de un cuerpo técnico de apoyo a la ciudadanía, desviando recursos públicos hacia fines partidistas.
Gobernabilidad condicionada: La dirección también tiene atribuciones para la mediación de conflictos sociales y políticos, lo que podría derivar en un control político para favorecer a Morena y a Daniel Serrano en las elecciones locales y decisiones administrativas.