La presidenta de la Asociación Civil ACME, Gabriela Torres, negó categóricamente que la organización tenga relación alguna con actividades ilícitas vinculadas a la extracción, acaparamiento o comercialización ilegal del agua en el Estado de México.
Durante un mensaje dirigido a la opinión pública, Gabriela Torres afirmó que la agrupación no ha participado ni directa ni indirectamente en los hechos que se investigan como parte del denominado Operativo Caudal, implementado por autoridades de los tres niveles de gobierno para combatir presuntas redes de comercio clandestino del líquido.
“Nuestra organización no tiene, ni ha tenido, participación alguna en actos ilícitos relacionados con la extracción o comercialización ilegal del agua. Rechazamos categóricamente cualquier intento de vinculación hacia nuestra asociación”, subrayó la presidenta de ACME.
Gabriela Torres precisó que ACME representa al sector transportista dedicado al abasto de agua en pipas, el cual, dijo, opera dentro del marco legal, con permisos vigentes y bajo normas ambientales y de seguridad. Añadió que su organización mantiene un compromiso firme con la legalidad, la transparencia y la responsabilidad social.
La dirigente también informó que se han instruido a las representaciones locales de la asociación para que colaboren con las autoridades en el intercambio de información que permita esclarecer cualquier hecho irregular.
“Nos deslindamos de toda persona que, sin autorización, haya hecho uso del nombre o logotipo de ACME para justificar actividades fuera de la ley. Estamos en la mejor disposición de aportar información suficiente y denunciar todo acto ilícito”, sostuvo.
ACME recordó además que la organización ha mantenido una participación activa en la denuncia de irregularidades en el manejo del recurso hídrico en Cuautitlán Izcalli. En 2021 y 2023, por ejemplo, la asociación se sumó a las denuncias de tomas clandestinas de agua en distintos puntos del municipio, entre ellos en la colonia Atlanta, donde, ante la inactividad del gobierno local, el entonces presidente de ACME, Jafet Sainz, impulsó acciones para lograr la clausura de un presunto pozo clandestino, señalaron.
En aquel momento, los vecinos de Atlanta, Infonavit Centro, Tepalcapa y Fidel Velázquez denunciaron que la escasez de agua potable en sus hogares se debía, en gran medida, a ese pozo irregular, del cual decenas de pipas cargaban diariamente de forma sospechosa. Gracias a la intervención de ACME y la presión vecinal, las autoridades clausuraron el sitio, afirmaron.
La organización destacó que estos antecedentes evidencian el compromiso permanente de la asociación con la legalidad y la defensa del derecho humano al agua.
“Aplaudimos que las instituciones actúen con firmeza. Nadie y nada por encima de la ley”, enfatizó la presidenta de ACME, Gabriela Torres.
Con este pronunciamiento, la Asociación Civil ACME busca clarificar su postura y deslindarse públicamente de los señalamientos surgidos tras el operativo, reiterando su compromiso con el abasto regular, responsable y transparente del agua en beneficio de la población.
